Silencio! ¡Silencio! ¡Silencio! Esta expresión
de la muda realidad violentaba mi conciencia.
Se refleja en la falta de
expresión de toda una nación que tiene un tumor oculto que deforma y corroe el cuerpo al callar la verdad sobre
la violación de los derechos humanos y la injusticia ambiental y social.
El silencio se comparte o se desafía. En este caso no se trata de la sabia forma de callar sino del silencio traidor. Era el silencio que comparte el crimen. El que niega
y deforma la historia. El que se mantiene sigiloso ante la invención de las mentiras, enhebra las ideas y engatuza la mente para negar la identidad cultural.
Aprendimos la cautela del miedo a través de la violencia, el terror, la guerra, a tal grado que somos un país ocupado militarmente, sin voces de protesta o de silencio al comprar la conciencia de los gobiernos.
La historia esta muda ante
la invasiones de piratas, filibusteros, marines , multinacionales que han asaltado
nuestras tierras , aires, bosques y aguas; desalojando las plantas, animales,
minerales y seres humanos haciéndolos emigrar en una cadena histórica infinita que persiste hasta el presente siglo.
El ultraje y la humillación y muerte se ha reflejado en los despojos violentos de los campesinos, lencas,
los garífunas, los misquitos, los pech, tawakas, chorties, olmecas y afrodescendientes
El silencio nacional es desesperante. ¿Será un mecanismo
de defensa o expresión de sufrimiento o de complicidad o será una forma de dominación del aparato criminal que nos vuelve insensibles ante los atentados contra la naturaleza
y la humanidad?
Estas ideas se tornaron obsesivas y no me dejaron dormir.
El cansancio me venció y en medio de la transición entre el dormir y el despertar,
se nutrió la imaginación.
Me encontraba en un inmenso cuarto de espejos que al mirarlos observaba en ellos la imagen de un de un gorila peludo de piel verde que hacia muecas frente al espejo, sonriente y con
gran sentido de humor. Luego dirigí la mirada hacia mi cuerpo y en vez de asustarme tuve la vivencia de que efectivamente
era el gorila de los espejos. Salte, me golpeé el pecho con ambas manos peludas y grite con todas las fuerzas de mi espíritu;
luego, retumbo la montaña. Libere la tensión de aquel silencio que me aterrorizaba. De pronto me desperté en la sombra de
un frondoso roble; al cual abrace y grite con todas mis fuerzas: ¡hay que romper el silencio criminal que nos mantiene dormidos!
Con aquel sueño, sentí el profundo compromiso unitario del despertar de la imaginación y la esperanza.
¿No es posible que continuemos inmovilizados y taciturnos frente a la invasión de las tierras, el asesinato de los bosques,
las aguas y los aires?. Sobre todo aquellos que hemos sido educados en las universidades, que nos dedicamos a la enseñanza,
que nos hemos formado en las áreas técnicas sociales, biológicas, de la salud y educación. ¿Como
es posible que los intelectuales y técnicos guardemos silencio ante la hecatombe
ambiental y cultural?
¿Porque permitir que nos atropellen y que vendan la patria? ¿Por qué no gritar como los gorilas para que las voces en defensa de la libertad
y la vida planetaria se escuchen en el mundo?. Nos invadieron las mineras y guardamos silencio; nos inundaron de plaguicidas
las bananeras y guardamos silenció, torturan los bosques y manglares las empresas
madereras y camaroneras y nos mantenemos
callados. Ahora los megaproyectos turísticos de Tela y las grandes represas del Tigre y del Patuca, son proyectos de
desalojo y muerte de las poblaciones. Asesinan a los dirigentes por las tierras
y aguas y la impunidad continua
Basta de silencio, silencio,
silencio, hay que gritar, gritar y gritar; sumarnos todos y todas a los gritos del
bosque de las aguas de los aires y de todas los hermanas y hermanos del mundo. Movilicemos las conciencias de los niños niñas
y jóvenes; marchemos unidos: obreros, campesinos, estudiantes, intelectuales solidarios con los pueblos y detengamos la maquinaria infernal de esa guerra que mantienen
las multinacionales. Los pueblos unidos son capaces de parar estos proyectos criminales que traicionan los intereses de la
patria y que son un asalto a la cultura y la vida
.*Presidente
del Movimiento Madre Tierra Honduras miembro de Amigos de la Tierra
Internacional y Oil Watch International